Argentina radicada desde hace décadas en Nueva York, Marcela Berland es presidenta y CEO de Latin Insights. En NYU, la Universidad de Nueva York, enseña comunicación estratégica, manejo de crisis, marketing y, dice ella misma, “reinvención”. Invitada por QSocial, habló sobre la percepción acerca de Trump en los Estados Unidos y la campaña de Zohran Mamdani. Aquí una síntesis de su exposición y de los diálogos con Y ahora qué?
Con larga experiencia como consultora de empresas y de candidatos, en los Estados Unidos y en América latina, Marcela Berland está acostumbrada a ejercer la distancia necesaria entre sus propias ideas o subjetividades y el análisis político y sociológico realista.
“Recordemos primero que Donald Trump está en su peor nivel de popularidad”, dijo como marco general la consultora Berland el martes 11 de noviembre. Era la invitada especial de QSocial, que presentó ese día su último monitor político, económico y de opinión.
Señaló que Zohran Mamdani se preocupó por detectar qué le preocupa a la población de Nueva York hoy. “Por un lado, la gente no está acostumbrada a la inflación, y la inflación crece”, dijo Berland. “Un gran factor del sueño americano, del American dream, es llegar a la vivienda propia. Con tasas de interés altas, ese sueño se hace cada vez más difícil de cumplir. Agreguemos a este panorama la labilidad diplomática de Trump por la guerra mundial de aranceles. Eso también le resta popularidad.”
El análisis de Berland es que Trump termina levantando a Mamdani como enemigo, al presentarlo como “comunista”, porque igual en Nueva York el actual presidente de los Estados Unidos ya está mal visto.
Mamdani, “que según muchos revela ideas radicalizadas”, relata Berland, tiene 34 años cumplidos en octubre. Trump cumplirá 80 el 14 de junio de 2026. Más del doble de la edad del alcalde electo. Pero cada uno a su modo y en su momento, demostraron gran habilidad en el manejo de las redes sociales. Y cada uno a su modo, ninguno llegó con experiencia previa en el sector público. Lo contrario de Andrew Cuomo, el ex gobernador demócrata de Nueva York a quien Trump terminó apoyando en las elecciones para la alcaldía como el voto útil contra Mamdani. Lo apoyaron Trump y, naturalmente, los superricos. En cambio, cuenta Berland, “Mamdani hizo mucho trabajo puerta a puerta”. Es decir: “Se tomó en serio el trabajo de campo de hablar y preguntar sobre los problemas y las aspiraciones, y eso es muy importante. Mamdani lo hizo y Cuomo no”. Con una ventaja adicional: Trump parte en Nueva York con un piso de 40 por ciento de rechazo entre los jóvenes menores de 30 años. Campo potencia apto para Mamdani, que trabajó mucho allí.
¿Qué hizo el alcalde electo con quienes habían votado a Trump para la presidencia, especialmente negros y latinos? Responde Berland: “Primero se planteó la pregunta, cosa que no es habitual en los candidatos. Y luego hizo otra cosa no habitual, que fue preguntarles a ellos. De esos contactos salió el concepto de affordability”.
Affordable es, en español, asequible, accesible.
Nueva York estaba siendo cada vez menos accesible para la mayoría de los neoyorquinos.
Mientras tanto, “Cuomo desplegó la campaña de lo que no se debe hacer”, opina Berland. “Poco contacto con los votantes. Nada de preguntar y tratar de entender.”
Refiere Berland que en uno de los debates les preguntaron a los candidatos qué países visitarían. En el medio estaba la especulación sobre qué diría Mamdani sobre Israel, país a cuyo Estado acusó en la campaña de genocidio. Mamdani lo resolvió de manera simple: “No voy a ir a ningún lado, porque acá en Nueva York es donde me eligen”.
Otra de las características fue el uso del humor, incluso con errores explícitos, como las palabras que le costaba decir cuando grabó un spot en español para los latinos. Hizo videos en seis idiomas distintos.
En cuanto a redes, Berland explicó que hay un trabajo basado en el uso de ecosistemas. No es un simple posteo sino algo más complejo, que aprovecha la existencia de creadores de contenido. “Muchos influencers lo apoyaron”, dice Berland.
¿Y el voto judío, si es que existe en la ciudad con mayor cantidad de judíos en el mundo después de Tel Aviv? En Nueva York viven dos millones de judíos.
“Ganó el 40 por ciento del voto judío”, responde Berland.
¿Qué pasó con establishment, que en general respaldó a Cuomo? Porque en campaña Mamdani criticó a los megadesarrolladores inmobiliarios, que control el negocio del Real State en Nueva York, pero no hizo blanco explícito en Wall Street. Berland cuenta que Mamdani no ocultó en ninguno de sus contactos su promesa de congelar una parte de los alquileres regulados y cambiar la alícuota en el impuesto a los que ganan más de un millón de dólares por año pero que, simultáneamente, tuvo encuentros sin exclusiones. Esas reuniones incluyeron a Bloomberg y a los directivos del J.P. Morgan.
Dice Berland que Mamdani “es bueno en TikTok, streaming y WhatsApp”, que tiene “un carisma casi único”, y que para un consultor “es cada vez más difícil trabajar con candidatos sin carisma” porque “se puede mejorar la personalidad de alguien, pero no cambiarla”.
Sobre el financiamiento de la campaña, Mamdani pidió que no le mandaran más dinero sino que, si estaban de acuerdo, salieran a la calle y participaran. Así llegó a decenas de miles de voluntarios.
“No ocultó que era musulmán”, y tuvo en cuenta las cuestiones de diversidad y feminismo, que en los Estados Unidos de Donald Trump se están convirtiendo en temas tabú.
Mamdani obtuvo el 51 por ciento de los votos. “Al final no ganó solamente con el voto de las minorías, que sumadas son dos tercios de la población de Nueva York”, narra Berland. “También tuvo votantes blancos clásicos, pero por sobre todas las cosas escuchó y representó a los invisibles de la ciudad.”
Un elemento clave, de acuerdo al análisis de Berland, fue su capacidad de enmendar un error grave en medio de la campaña. Existe en Nueva York un movimiento para quitarle fondos a la policía. Mamdani comenzó por respaldar ese proyecto, pero luego reaccionó, dijo públicamente que se había equivocado e inclusive se reunió con policías para demostrar cercanía.
¿Cómo fue su equipo de campaña? Dice Berland que en el caso de Mamdani “el candidato hizo al equipo”. Más bien “se concentró mucho en personas que eran sus delegados, que trabajaban fuerte”. Los voluntarios “querían ser voluntarios, y se sabe que el entusiasmo crea ilusiones de cambio y tiene impacto porque va más allá del resultado electoral”.
Más todavía: “Hay una trilogía básica en campaña que es escuchar, aprender y aplicar. Los voluntarios la practicaban. El propio Mamdani también. Caminando. O comiendo. O yendo a un barrio, y no sólo a la zona de vive, en Queens”.