”Es la primera vez que se da una oportunidad histórica de una polarización correcta”, dice Federico Storani. “Hay dos fuerzas en disputa, que son históricas en la Argentina. La conservadora con sesgo autoritario que es reivindicadora incluso de la experiencia de la dictadura militar. Y una que está en las antípodas de eso y que tiene que expresarse con un emergente de tipo político. Si no vamos a estar complicados porque se va consolidar el modelo de Milei en las elecciones de medio término.”
Mauricio Macri y Javier Milei conforman un nuevo partido conservador con rasgos autoritarios. La convocatoria al Pacto de Mayo es una extorsión gravísima hacia los gobernadores, con un sistema que acentúa el unitarismo y el manejo de recursos a cambio de adhesión política. Ambas afirmaciones son parte de las reflexiones que el dirigente radical histórico, ex diputado nacional y ex ministro de Interior Federico Storani señaló en diálogo con ¿Y ahora qué?
– Se acaban de cumplir los primeros 100 días de gestión de Milei. ¿Cómo calificás hasta el momento su gobierno?
– Se presentó como el gobierno del cambio y ese es un concepto neutro. No es ni bueno, ni malo. Pero en este caso podemos decir que es un cambio muy malo y negativo. Irse al cambio, por lo general, se lo asocia con lo nuevo y este gobierno no tiene nada de novedoso. Es la reedición corregida, aumentada de lo ya intentado en la última dictadura militar por Martínez de Hoz.
– ¿En qué se observa?
– Una política de desregulación de la economía, liberación general de los precios y tarifas, apertura de importaciones, devaluación, etcétera. Todo esto es un ajuste que recae sobre los sectores más vulnerables, principalmente, los asalariados y jubilados. Es lo mismo que se intentó en la etapa de Menem- Cavallo y también en el gobierno de Mauricio Macri.
– Ves continuidades con la administración de Macri.
– La diferencia es que en esta oportunidad se hace de manera mucho más violenta y brutal. Esto es lo que ellos denominan schock. Macri ya lo venía pensando cuando dijo ´que si fuera Presidente de nuevo haría lo mismo, pero más rápido´. Es la única autocritica que se hicieron. Esa es la personificación metafórica de la motosierra y la licuación. Macri se siente proyectado en Milei. Palabra más, palabra menos es el eje del Consenso de Washington que ahora es el eje de la convocatoria del Pacto de Mayo.
– ¿Cómo analizás el llamado al Pacto de Mayo?
– Parece, simplemente, la convocatoria a un pacto de adhesión. Es una imposición. Ya plantearon que los contenidos del Pacto de Mayo son innegociables y no se abren a diálogo. En su discurso ante la Asamblea Legislativa, Milei expuso que iba a ver una serie de reuniones que no se han concretado. El Pacto de Mayo es una extorsión gravísima hacía los gobernadores, con un sistema que acentúa el unitarismo y el manejo de recursos a cambio de adhesión política. Plantea que el que no se adhiere a ese contrato será sancionado desde el punto de vista económico.
– ¿Y cómo avizorás que puede ser la relación del gobierno nacional con los gobernadores aliados? ¿Era esperable tanta tensión como sucedió con Chubut semanas atrás?
– No era esperable, pero creo que va haber un tira y afloje. La intención de Milei es someterlos. Porque también lo novedoso que existe en este esquema es que el diseño institucional busca consolidar un Estado de excepción, expresado en el DNU 70/2023 con las facultades delegadas y acentuado en un protocolo de seguridad que se desliza hacia un Estado policía. Esto último es para aplastar la protesta social que pudiera generarse como consecuencia de las políticas económicas. Además, existe el peligro de la militarización que es el proyecto de la dupla Bullrich-Petri.
– ¿Cómo calificás entonces al gobierno de Milei?
– Desde el punto de vista político Macri, Milei, Bullrich, Petri etcétera, conforman un nuevo partido conservador fuerte con rasgos autoritarios. Lo que está llevando adelante el oficialismo es muy malo. Los contenidos son pésimos. Ponen en peligro el patrimonio nacional y la soberanía, con por ejemplo con la derogación de la ley de tierras, de la ley de Glaciares, la de Manejo del Fuego. Están poniendo en peligro la soberanía alimentaria con la posibilidad de extranjerización de la Pampa Húmeda. O permitir la injerencia de fuerzas extranjeras en la Hidrovía. Hay un proceso de avance que diseña una política fuertemente extrativista y primaria.
– ¿Ante este escenario que rol tiene o debiera tener el radicalismo?
– Aspiro, deseo y militamos para que el radicalismo se ubique en una posición que esté en las antípodas del proyecto de Milei. Han sido muy buenas las expresiones de oposición del Presidente del Comité Nacional al Decreto de Necesidad y Urgencia y sus fundamentos, no sólo por su constitucionalidad sino también por sus contenidos. También fueron muy positivas intervenciones de otros legisladores como Manes y otros. Nuestra militancia, me refiero al sector que represento, ha estado acompañando desde el primer día la protesta social. Ya sea desde el paro de la CGT, hasta la marcha a Tribunales y siguiendo todo tipo de movilización, incluida, por su puesto, la última del 24 de Marzo.
– ¿Sigue existiendo Juntos por el Cambio?
– Juntos por el Cambio no existe más desde el momento en el que Macri y Bullrich salieron de esa famosa reunión en Acassuso en el que establecieron un contubernio. Al principio decían que iban a dar un apoyo incondicional al supuesto cambio que representaba Milei, pero luego vimos que hubo una cantidad de contraprestaciones. Bullrich integra el gabinete en un lugar relevante, Petri también. Y Macri aunque no haya obtenido todo lo que ha querido, en buena medida se está realizando su expresión de deseo y tiene una porción de poder importante. Caputo no es neutro, es amigo de él. Y así tantos otros.
– ¿El radicalismo tiene que aspirar a conformar una coalición partidaria?
– La oportunidad que existe es conformar una fuerza de carácter popular que vaya construyendo una alternativa política. Aspiramos a que el radicalismo se incline hacia un pensamiento socialdemócrata como decía Alfonsín. Hay otros sectores que también harán su proceso. Pensemos en el peronismo. Si abreva más en un pensamiento más socialcristiano, pueden converger dentro de lo que también el propio Alfonsín señalaba como el tercer movimiento que permita ser una alternativa. Eso es lo que nosotros deseamos, no es lo que está ocurriendo. Es un proceso de debate donde una parte del radicalismo, el llamado Grupo Malbec, va a formar parte del partido conservador. Como también ya hay sectores del peronismo que integran el partido conservador: Scioli, Ruckauf y el menemismo.
– ¿Ves la posibilidad de que el peronismo y el radicalismo establezcan un acuerdo electoral?
– Hay que trabajar mucho para eso, pero sería lo deseable.
– ¿Incluye al kirchnerismo?
– Ese proceso de debate lo tiene dar el peronismo a puertas adentro. Nosotros no nos vamos a involucrar en ello. Pero el acuerdo peronismo y radicalismo es lo deseable porque es la primera vez que se da una oportunidad histórica de una polarización correcta. Hay dos fuerzas en disputa, que son históricas en la Argentina.
– ¿Cuáles son?
– La conservadora con sesgo autoritario que es reivindicadora incluso de la experiencia de la dictadura militar. Y una que está en las antípodas de eso. Que tiene un pensamiento mucho más cercano a la sensibilidad popular, que defiende lo nacional, lo público, y que tiene que expresarse con un emergente de tipo político. Si no vamos a estar complicados porque se va consolidar el modelo de Milei en las elecciones de medio término.
Ojalá pueda llegarse a algo como lo que sugiere Storani. Pero qué difícil es creerle a un radical cuyo partido, centenario, lleno de históricas figuras políticas que han llegado hasta ser presidentes, un partido de alcance nacional, haya echado por la borda esa gloria para entregarle toda su infraestructura a Macri y ponerse a sus pies para que sea presidente. Ese fue el germen de lo que estamos viviendo ahora con Milei.
Por eso se me hace difícil pensar que los radicales pueden ser socios confiables en cualquier frente que se pretenda armar contra Milei.
Segun dijo, los radicales de derecha se quedatian con Pro/LLA, alli entra Petri, Cornejo, Tetaz, etc y el peronismo deberia volar al peronismo federal x q de peronista no tienen nada, si se forma una alianza q sea del centro, centro derecha y centroizquierda pero moderados y centro centro, el resto q vuele
Clarísima la descripción de Storani y esperanzadora. Pero lo urgente es cancelar este DNU y antes de mayo 25.
Los dos grandes movimientos populares del siglo XX, deben unir sus fuerzas para terminar antes de que sea tarde con esta peligrosa intentona de domesticar definitivamente al pueblo argentino y entregar los destinos de la patria al poder internacional del dinero asociada al autoritarismo reaccionario y criminal.
Entonces porque la cris entrego a china nuestra soberanía en 2014 … Cuantas soberanías tenemos para regalar
Tuve el placer de conocer a Storani cuando volví del exilio para ofrecer mi colaboración a Manuel Sadosky, q liderabara SECyT. Alfonsín me presentó a Storani como referente del Gobierno, para la aplicación de fondos italianos y europeos de cooperación técnica.
Son representantes nacionales que nos han enorgullecido en el escenaro inernacional, cuya ausencia en la conducción de las instituciones se padece enormemente.
Me parece desacertado pensar en unirse a los k cuando demostraron ser tan extremos y oligárquicos como lo que quieres combatir; digo bien, oligárquicos , dado que utilizaron el estado para su prropio beneficio
Coincido absolutamente con Federico Storani, una persona que viene trabajando hace años en el planteo actual.
Tengo 74 años, soy cristiano y peronista; deseo volcar toda mi experiencia política-económica en el marco de la coordinación del 3MH, que ya planteaba Don RA.
No obstante ello, tenemos que ser nosotros quienes universalicemos un impuesto progresivo a las ganancia y eventualmente, uno extraordinario a la riqueza, ya que no hacerlo cristaliza su contrapartida que es el aumento permanente de los pobres y humildes de la Patria.
En síntesis, bajar tasas nominales de impuestos, reducir la evasión monumental del orden del 45% del PBI y obviamente, revisar todos los gastos de los tres niveles del Estado.
Me interesaría participar activamente!!!
Fui cesanteado por el último golpe militar el 9 de abril de 1976.
Me comprometo a morir de pie, antes que humillarme ante el Sector Tradicional Conservador.
VIVA LA PATRIA, CARAJO!!!
Explícame en qué son oligárquicos, además explicame porque Raimundi, Moreau, Palazzo, Gustavo Lopez, Santoro por citar algunos radicales son aliados de Cristina.
Nunca participe en politica,pero si en mis 70 años sufri el Rodrigazo,Martinez de Hoz,Alfonsin,de la Rua ,Kinerismo y siempre es la misma porqueria y le pregunto al Sr. Storani que hicieron ellos en los años que estubieron en el poder,son unis hipocriras!!!
Es un reverendo pelotudo. Admirador del peronismo pseudo progre. El mismo que cuando se creó la convertinilidad dijo estar en contra aun cuando fuera exitosa. El mismo que propuso a de la Rúa, de centro derecha y comprometido con la estabilidad, para luego dar un golpe civil.